jueves, 25 de diciembre de 2014

MITOS SOBRE EL DIVORCIO


MITO 1 SOBRE EL DIVORCIO "LOS CRISTIANOS NO SE DIVORCIAN"

Aunque lo cierto es que Dios siempre estará en contra del divorcio, la realidad dentro de la iglesia cristiana es que el porcentaje de divorcios dentro de ella es prácticamente el mismo que el del mundo.

Y cada día son más no solo los congregantes, sino los líderes y pastores que desgraciadamente dan termino a sus matrimonios.

Ya se que este tema no es algo de lo cual la iglesia tenga que enorgullecerse, pero es la realidad, y no poder pensar que cerrando simplemente los ojos esta dejará de existir.

Tenemos que buscar soluciones, tanto para los matrimonios que están apunto de romperse, como para los que ya se han roto, pues aunque creo de parte de Dios que lo ideal seria que todo matrimonio destruido fuera reparado, lo cierto es que la mayor parte de los matrimonios que se separan nunca vuelven a juntarse.

Lo cual deja a su paso hombres y mujeres heridos, hijos con vidas destrozadas, problemas económicos fuertes, planes de vida acabados,... y aún uno que otro suicidio.

Por eso es tiempo de ir tratando el tema, porque si Dios es un Dios que da vida, las familias destruidas y las personas que las conformaban, no pueden seguir así para siempre.


MITO 2 SOBRE EL DIVORCIO "PASE LO QUE PASE, NO ME VOY A DIVORCIAR, DIOS TIENE QUE RESTAURAR MI MATRIMONIO"

Como declaración de fe está bien dicha, pero eso no es lo que dice la Biblia, la Palabra de Dios dice que tú fuiste llamado o llamada a ser libre, y aunque NO se te permite divorciarte, SÍ se te autoriza separarte de la otra persona.

Parte del objetivo de esta separación es que la otra parte recapacite sobre sus acciones, vuelva su mirada a Dios en parte por el amor que te tiene y regrese con el tiempo; sin embargo en nuestros días lo más común es que la otra persona se busque alguien más, y Sí, vuelva a ti, pero solo para pedirte el DIVORCIO, porque ya tiene alguien más.

Yo conozco y sé, de muchísimas parejas donde la mujer es golpeada brutalmente, aunque hay casos donde el golpeado es él y no ella; también sé de otros, sobre todo de drogadictos, donde él va y consume la droga y después ella va y paga la deuda con relaciones sexuales; existen otros donde el aparte de la esposa siempre tiene otra pareja en turno, y se la pasa diciéndole a la esposa que será la última vez, pero esta nunca llega; hay otros donde el lleva años sin trabajar, no hace nada malo, pero tampoco nada bueno, y el más que un esposo es un hijo más; y en los más graves la pareja es homosexual y aún así la soportan. NO me digas que a cosas como estas FUISTE LLAMADO A VIVIR EN CRISTO.

Y aunque es cierto que Dios puede restaurar tu matrimonio,y yo conozco muchísimos casos así, también sé que en muchos de esos casos, más que un milagro fue una prueba de resistencia donde la mujer o el hombre sufrieron por más de 20 o 30 años humillaciones de todo tipo, y es hasta que su pareja ya esta vieja y nadie más la quiere cuando dice recapacitar y ahora si todo es FELICIDAD.

Porque seamos sinceros, para que una pareja funcione, son los dos los que tienen que desear que funcione, y si, Dios puede hacer un milagro y cambiar a tu cónyuge, pero en la mayor parte de las parejas con problemas graves esto no sucede; ejemplo de ello es un hombre con el que hable hace unos meses, ya era la tercera vez que traicionaba a su mujer y estaba en proceso de restaurar su matrimonio, entonces le pregunté si ahora si sería fiel y el me respondió: "no, como cree, si ya tengo otra de nuevo, nada más que ahora si me voy a cuidar para que no me descubran".

Entiendes, hay casos donde Dios restaurará tu matrimonio, pero hay otros donde si optas por sacrificarte muchos años tal vez tendrás éxito y otros donde es inevitable el divorcio, porque en ocasiones aún está en riesgo la vida misma.


MITO 3 SOBRE EL DIVORCIO "YA ME DIVORCIE, PERO SÉ QUE MI PAREJA VOLVERÁ CONMIGO OTRA VEZ, PORQUE ESA ES LA VOLUNTAD DE DIOS"

Hace tiempo conocí a un pastor cuya esposa lo había dejado y se había ido con otro hombre, después de esto DIOS le habló y le aseguró que ella volvería a estar con él, y un día ella volvió, a pedirle el divorcio y él se lo dio, cuando estaban frente al juez el le dijo: "Señor Juez, un día volveré a esta misma sala otra vez, para casarme con la misma mujer con la que ahora me he divorciado"; todos se rieron, incluyendo a la ex esposa y se fueron; pero algunos meses más tarde él volvió a la misma sala, con el mismo juez, y con la misma mujer A CASARSE OTRA VEZ CON ELLA, y ahora son muy felices.

Y aunque he sabido de otras muchas historias parecidas a esta, también conozco y sé de muchísimos cristianos que llevan años esperando a que su pareja regrese otra vez a su lado y esta nomas NO HA REGRESADO; pero esa espera, más que consuelo solo los ha cansado tanto espiritual como física y emocionalmente.

Y los ha cansado porque han quedado en una especie de "stand by" emocional, en el que ni regresa la ex pareja, ni de plano desaparece de su vida y les permite continuar sin ella ha solas.

Y esto sucede porque en la mayor parte de estos casos más que una cuestión de fe, es una cuestión de lógica; si por ejemplo, tu esposo se divorció de ti, se fue con otra, se casó con ella y tuvo otros hijos, no te parece ilógico esperar que regrese nomas porque tu dices que esa es la "voluntad de Dios"; o si por ejemplo, tu esposa se divorció de ti, se fue con otro, lleva años con él paseando por el mundo y vive muy feliz, no te parece ilógico que pierda todo eso solo por venir a limpiar tu casa y encargarse de los niños, nomas porque tu dices que "así lo dice el Señor".

Observen que en el caso que les conté al principio, si, había fe de por medio, pero no solo eso, en primera, Dios le había hablado a esa persona directamente como en el caso de Abraham, no era solo una esperanza sin ninguna base, además, la ex esposa no se había casado otra vez ni había tenido más hijos, y el tiempo que pasó entre su ida y regresó fueron solo meses, entonces también tenía su lógica el que esa mujer recapacitará sobre lo que estaba perdiendo y volviera con su esposo poco tiempo después.

Pero no siempre pasa esto, conozco otros casos donde la esposa se fue hace muchos años, y no se fue nomas porque sí, sino porque el esposo la maltrataba continuamente, y ya que se fue, se casó con otro que si la trata como es debido, y vive muy feliz; pero ahora el ex esposo después de haber perdido lo que amaba, ahora sí, va día a día con sus pastores a pedirles que oren para que regrese a su lado, ¿Tú crees que regresará?

Yo no lo creó, en primera porque lo que siembras es lo que cosechas, y si tu fuiste el culpable de que tu pareja se fuera, como pides ahora que regrese; y en segunda porque es ilógico, para que dejar ahora una vida feliz y tranquila y regresar a donde tanto te maltrataron, ¿O tú si lo harías si fuera tu caso?

Por eso pienso que lo más adecuado no es decirle a todo divorciado o divorciada que Dios restaurará su ex hogar, y aplicar versículos como Joel 2:25, donde dice: "Os compensaré por los años que ha comido la langosta, el pulgón, el saltón y la oruga", sino mas bien analizar detenidamente caso por caso, y ver sobre todo si ya han pasado muchos años, si el o la culpable de que el matrimonio sucumbiera es quien ahora pide la oración, si la ex pareja ya se casó nuevamente o si ya tuvo más hijos con otra persona, y aclararle entonces que lo MÁS SEGURO ES QUE NUNCA VUELVA.

En caso contrario, pues si, orar para que su ex regrese y darle algunos consejillos.

Porque en muchos casos, más que pedir restauración, creo que lo mejor es pedir por la sanidad emocional de la persona que ha sido dejada y ayudarle a que esto se haga realidad en su vida.

Y ya que su corazón halla sido sanado, después de todo un proceso, igual ver si existe alguna posibilidad de que su matrimonio sea restablecido nuevamente, lo cual en la mayoría de las veces, ACLARO QUE ES CASI IMPOSIBLE.


MITO 4 "YO ME DIVORCIÉ, PERO AHORA ME DICEN QUE DEBO PERDONAR A MI CÓNYUGE POR LO QUE HIZO Y REGRESAR CON ÉL"

En este punto tenemos que aclarar dos cosas primero; para que un matrimonio sea estable se necesitan dos personas, pero para que surja un divorció en ocasiones basta solo una, que aunque no tendrá nunca el 100% de la culpa, muchas veces si lleva la mayor parte de ella; y, generalmente el que ocasiona el divorcio es quien menos sufre, y quien más herido queda en este proceso es la víctima, que generalmente es quien menos culpa tiene.

Así pues, llega a pasar, que después de todo el proceso de divorcio, una vez que cada uno de los cónyuges ya viven aparte y el tiempo comienza a transcurrir, sea uno de ellos, generalmente el que menos sufrió y por lo tanto el que más contribuyó a esta separación, quien pida perdón y procure la reconciliación.
Y es aquí donde muchos aprovechan la ocasión para decirle a la parte más afectada, que debe perdonarlo y darle otra oportunidad, como si las dos cosas estuvieran forzosamente unidas, porque una cosa es perdonar y una muy diferente es darle a la ex pareja otra oportunidad.

Perdonar no es olvidar totalmente el asunto, si fuera así, porque Dios después de perdonar a David por el adulterio que cometió con Betsabé y el posterior asesinato de Urías el esposo de Betsabé, no simplemente olvido el asunto, sino que primero quitó la vida al hijo que había sido concebido por ellos.

Y es que perdonar más que olvidar es pasar por alto el resentimiento y el deseo de venganza hacia la otra persona, es decir que, cuando perdonas dejas de odiar a la otra persona y ya no deseas que pague por lo que te hizo; pero no significa que te hallas olvidado totalmente del asunto y menos que le des otra oportunidad a la persona.

Te voy a poner un ejemplo: Imagínate que tienes un negocio de venta de autos, y tu administrador te roba la ganancia de uno de ellos y lo descubres, para entonces él ya se gastó el dinero y no puede devolvértelo,entonces tu decides perdonarlo, que significa, bueno, una que no lo odias por lo que te hizo, y dos, que ya no le pides que te devuelva el dinero. Pero ¿Que pasaría si en ese momento te pide que le devuelvas también su puesto de administrador inmediatamente? LO HARÍAS
Yo creo que NO, lo perdonaste y ya no le pides que te devuelva el dinero que se robó, pero la confianza que tu le tenías ya se perdió, es algo que el debe recuperar con el paso del tiempo, si bien le va le darás el puesto de vendedor y posiblemente algún día le devuelvas su puesto de administrador, pero no en ese momento, porque el asunto esta perdonado, pero NO olvidado.

Y eso mismo pasa en algunos divorcios, una vez que la parte menos dañada, en la mayoría de los casos el ex esposo, y en algunos la ex esposa, hace un recuento de las cosas que a perdido: pareja, hijos, apoyo, relaciones sexuales, bienes materiales,... Entonces si le viene el ARREPENTIMIENTO y quiere que todo vuelva a la normalidad como si NADA HUBIERA SUCEDIDO.

Y eso no es posible así nomas porque sí, porque aunque es cierto que la VOLUNTAD DE DIOS es que todo divorciado regrese algún día con su pareja y se VUELVA A CASAR con ella, la realidad es que esto requiere de un proceso largo, en el que poco a poco la parte más culpable deberá ganarse la confianza de la parte más dañada y demostrarle que su arrepentimiento es genuino, además de que la parte más afectada deberá perdonar también gradualmente y en su totalidad a la otra parte, además claro está de corregir sus propios errores, porque como dije al principio, en todo divorcio los dos tienen la culpa, nada más que uno tiene menos culpa que el otro.

Y ESTO NO SIEMPRE SE DA, sobre todo cuando ya fueron varias las infidelidades, hay problemas de alcoholismo o drogadicción, o en el caso de violencia familiar, una de las parte estuvo a punto de perder su vida.


MITO 5 "NOS DIVORCIAMOS, PERO QUEDAMOS EN BUENOS TÉRMINOS, AHORA SOMOS AMIGOS"

Es común escuchar a personas que ya se han divorciado, sobretodo a mujeres, decir: "Ahora que nos hemos separado, quedamos en buenos términos y solo somos amigos"; esta frase se oye bien, pero difícilmente puede ser real; pues un amigo o amiga es una persona con la que se disfruta pasar el tiempo, y en la que se puede confiar, alguien con quien se puede compartir información personal y aún confidencial, a sabiendas de que no la divulgará ni la usará posteriormente en nuestra contra; y estos no son precisamente los términos en los que quedan las personas divorciadas.

Pues prácticamente todas las parejas que se divorcian, no lo hacen de común acuerdo, sino que después de una serie de traiciones, de humillaciones y de problemas que parecen no tener fin, es una de ellas la que le pide a la otra que se separen, lo cual a su vez genera otra serie de problemas, recriminaciones y ataques, en los que lo primero que se pierde, si es que todavía existe, es la confianza en la otra persona y las ganas de pasar tiempo con ella.

Por eso es que las personas divorciadas más que quedar como amigos, terminan más bien la relación como enemigos, y aunque con el tiempo deben perdonarse y reconciliarse, tanto por su propio bien como por el de sus hijos, si es que los tuvieron, difícilmente un día volverán a tener entre ellos esa confianza que un día se tuvieron.

Aunque sí, pasa que una de las partes divorciadas, generalmente la que NO pidió el divorcio, alberga dentro de sí la esperanza de que no todo se ha acabado y que existe la esperanza de rehacer el matrimonio, por lo que en ocasiones llega a pensar realmente que es amigo o amiga de su ex pareja.

Pero eso no es cierto, y más que ayudarle es un obstáculo en su vida, que no le permitirá sanar emocionalmente y avanzar, porque al pretender que todavía existe cierta relación con quien una vez fue su cónyuge, no acepta que EL MATRIMONIO HA ACABADO.

En cuanto a que si DIOS PUEDE REHACER ESE MATRIMONIO NUEVAMENTE, si, Él puede hacer el MILAGRO, pero por el momento, después del divorcio, NI HAY MATRIMONIO, NI HAY AMISTAD.




Lo mejor es que tanto el hombre como la mujer que se han divorciado acepten que todo acabó prácticamente, se perdonen y se reconcilien, aunque no como amigos, por lo menos para no estarse atacando continuamente, pues con ello se dañan tanto a sí mismos como a sus hijos, si es que los tuvieron; ya con el tiempo, SI EXISTE LA PROBABILIDAD DE QUE DIOS HAGA UN MILAGRO Y VUELVAN NUEVAMENTE A ESTAR JUNTOS si así lo desean.
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