martes, 2 de febrero de 2016

Y EL PROBLEMA DE NUNCA ACABAR: LA VESTIMENTA EN LA IGLESIA.



En una sociedad machista como la nuestra nunca faltan en las iglesias los pastores, o peor que eso, las esposas de los pastores; que quieren imponer a las congregantes, en especial si son madres solteras, el como deberían ir vestidas, según dicen para que los "pobres e inocentes" hombres que asisten a la congregación no se sientan seducidos y con ellos debilitados espiritualmente.

Aunque la realidad es que en la mayor parte de las iglesias cristianas, las primeras que visten en ocasiones como si fueran a un cabaret y no a la iglesia son las hijas de los pastores; y nadie les dice nada, o sí.

Y no se diga las de la alabanza, sobre todo si pertenecen al grupo de panderos, llevan unos vestidos largos como de monjas, pero un maquillaje y una actitud en gran parte de las veces propia más de una prostituta que de una adoradora.

Por que lo sé, pues porque lo veo cada domingo en montones de iglesias, si lo malo como dijo Jesús no está fuera del cuerpo, sino dentro de él; porque aunque pintes de blanco un sepulcro, no por eso dejará de tener huesos de muertos dentro de sí.

De ahí, que las que más critican la vestimenta en la iglesia son generalmente las mujeres casadas, dicen ellas que para los hombres de la congregación no tengan malos pensamientos, pero por experiencia se que quienes más lo hacen, son aquellas mujeres que tienen esposos de "ojo alegre", que no saben ciencia cierta, cuando será la próxima vez que sus maridos les sean infieles.

Así que el problema no es realmente externo, ES ALGO DEL CORAZÓN, porque de nada sirve que vistan a todas mujeres como monjas dentro de la iglesia, si al salir los hombres, en el primer restaurante donde les sirvan comida, se les "salgan los ojos" cuando una mesera atractiva les muestre el menú.

Entiendes, tu eres una madre soltera, sí, pero a su vez también eres una mujer cristiana a la que Dios le a dado sabiduría, así que tu sabes cuales son perfectamente tus gustos y límites en cuanto a tu forma de vestir, la cual no tiene porque variar mucho al entrar a la iglesia, pues finalmente Dios está en todos lados y es quien siempre te está observando, y no los pastores ni sus esposas.

POR ESO ES QUE SI CONSIDERAS QUE UN VESTIDO O CONJUNTO, NO SÉ, ES ADECUADO PARA LLEVAR A LA IGLESIA, DEBE SERLO TAMBIÉN PARA ESTAR EN TU TRABAJO O SALIR A PASEAR A ALGÚN LUGAR, Y VICEVERSA, LO QUE ES ADECUADO PARA VESTIR FUERA, LO ES ADECUADO PARA VESTIR DENTRO DE LA CONGREGACIÓN.

CREO QUE ES UNA REGLA MUY FÁCIL DE SEGUIR Y MUY ACERTADA, sobre todo en su caso, que como madre solteras a veces son desgraciadamente blanco fácil de otras mujeres, que por estar correctamente casadas, creen que eso les da el derecho de atacarlas.