En principio, lo que a continuación voy a comentar no es para que veas las peliculas listadas anteriormente; dice la Biblia en Romanos 14:6 “El que come, para el Señor come, porque da gracias a Dios; y el que no come, para el Señor no come, y da gracias a Dios.”; asi que si consideras que no es bueno ver estos filmes, excelente, lo haces para la Gloria de Dios y si después de analizar el tema consideras que tienes el nivel espiritual adecuado para verlos, adelante, también lo haces para su Gloria.
Mira, entre las muchas similitudes que todos ellos tienen, las más notorias son:
- Nacieron con un objetivo en la vida.
- Peligraron en el desarrollo de su misión.
- Tenían un adversario que no solo ponía en peligro su vida, sino el destino del mundo entero.
- Finalmente lo vencieron, librando de esta forma del mal no solo a su generación sino a las generaciones venideras.
Puedes echarle la culpa al diablo de dichas similitudes y olvidarte del asunto si así lo deseas, pero puedes también considerar que de alguna forma todo personaje legendario es en parte una expresión simbólica de nuestro deseos, temores y tensiones inconscientes como seres humanos que somos.
Y deducir así, que dentro de todo hombre sobre la tierra existe el deseo de un salvador, de ahí que aquellos que conocen al Señor busquen la forma de satisfacer dicho deseo.
¿Qué deduces ahora de todos esto?
¿Acaso no hay momentos en tu vida tan criticos en los que anhelarías algún tipo de héroe a tu lado?
No te preocupes, lo tienes, se llama Jesucristo.
¿Te servirá de algo este comentario o afectará tu fe?
Espero con todo el corazón que se la última opción.
